Derretir la mantequilla, el queso crema y la leche a fuego bajo mientras vamos revolviendo con una espatula.
En un bowl aparte batimos las yemas y las vamos agregando la mezcla de manteca, queso crema y leche. Mezclamos. Le agregamos la harina y la maicena tamizadas.
Con las claras vamos a hacer un merengue francés: batimos las claras a punto nieve y vamos agregando el azúcar por partes.
Seguimos hasta que se forme un merengue firme y brillante.
Mezclar las dos preparaciones, tiene que quedar una mezcla bien unida y a la vez no se puede perder el aire del merengue. Para eso hay que dejar de lado las varillas de la batidora, agarrar la espátula y muy suavemente integrarlas con movimientos envolventes, siempre en la misma dirección.
Volcar la preparación en un molde totalmente cubierto de papel aluminio y/o manteca. Asegúrese que esté bien cubierto así no entrará nada de agua cuando lo pongamos a baño María.
Llevar a baño María en un horno precalentado a 165º C por 25 minutos, y luego bajar a 140º C por 50 minutos más.
El cheesecake japonés debe quedar dorado por arriba. Puede tardar más así que estén atentos y tengan paciencia.
Una vez que esté, apagar el horno, abrir un poquito la puerta y dejar que se enfríe ahí. Una vez frío lo sacamos y desmoldamos.